Cuando descubrí este mundo, gracias a la oportunidad que me brindó una amiga de trabajar con ella dedicándonos a la repostería creativa, me quedé sorprendida. Sentí que era lo que yo quería porque unía a dos mundos que siempre me habían gustado, el arte y los dulces.

 Gula  y creatividad…dulce locura.

 El año y medio transcurrido en DOLCEPENSIERO ha hecho nacer en mí el deseo de profundizar y experimentar por mi cuenta ,explorando todos los aspectos de la pastelería creativa.

La idea nace de un episodio curioso que ocurrió hace poco. Estaba con mi marido y los niños paseando por el centro de Madrid cuando me tropecé literalmente con un cortante para galletas con forma de murciélago. Dada mi pasión y mi interés por este mundo lo interpreté como un signo del destino :“Te animo a que enseñes, a los demás, tus creaciones y lo que sabes hacer”.

Naturalmente todo esto me lo estaba diciendo ese simpático bichito con alas de acero inoxidable que se había cruzado en mi camino.

Elvira